Denaria ha valorado de forma positiva el acuerdo de la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital del Congreso de los Diputados para impulsar la retirada de dinero en efectivo en comercio, una práctica conocida como ‘cashback’ o ‘cash-in-shop’, que tiene como objetivo reducir la dependencia de cajeros automáticos para realizar este tipo de operaciones.
Sin embargo, la plataforma considera que todavía quedan «muchos aspectos» por resolver para facilitar totalmente el acceso al efectivo de los ciudadanos, según ha indicado hoy a través de una nota de prensa.
En opinión de Denaria, la proposición no de ley debería recoger la importancia del efectivo para la sociedad, la libertad de elección y el problema de acceso que existe en la España rural y que «no está solucionado». «No se puede esperar años a una nueva directiva y el Gobierno debe asumir su responsabilidad donde no llegue la voluntariedad/rentabilidad del sector bancario, porque todos estamos obligados a estar bancarizados», señala.
Además la plataforma, cuyo objetivo es trasladar a la sociedad la relevancia del dinero en efectivo, considera que el debate sobre el acceso al efectivo debe tener un enfoque «amplio», ya que afecta a diversos aspectos de la economía y de los hábitos de pago.
En ese sentido, considera que los grupos parlamentarios deberían alcanzar acuerdos para la instalación de máquinas de efectivo con operadores no financieros, redes de desarrollo rural o redes de servicios, como el que ya se ha iniciado con Correos, que permitan la realización de operaciones financieras básicas (retirada e ingreso de efectivo, entre otras), en zonas rurales y despobladas.
Para Denaria, sería «muy conveniente» extender esta medida a otras redes de gran capilaridad, como pueden ser farmacias, estancos, despachos de loterías o gasolineras, así como fomentar cajeros multimarca o de marca blanca, en los que las diferentes entidades financieros compartan los ingresos y los costes de su funcionamiento.
Otras medidas que ha solicitado son avanzar en la prestación de servicios financieros con unidades móviles desplazadas (‘ofibuses’) que atiendan personalmente a los clientes, o establecer acuerdos con entidades no financieras para el establecimiento de cajeros.
Por último, Denaria recuerda que el dinero en efectivo «sigue siendo una garantía frente a un crecimiento exponencial del fraude en entornos tecnológicos».
Fuente: Forbes