El efectivo en un entorno cambiante
En un contexto de constantes cambios sociales (digitalización, crecimiento en el uso de nuevos medios de pago, despoblación rural, ...), el efectivo mantiene su relevancia como medio de pago en nuestro país. Un reciente estudio realizado por el Banco de España con una muestra representativa de la población sitúa al efectivo como el medio de pago más usado a diario en establecimientos físicos. El 65% de los encuestados afirman emplearlo a diario. Se trata de una cifra muy similar a la registrada en el estudio realizado en 2022, en el que dicho porcentaje era el 64%.
¿Quién usa en mayor medida el efectivo?
El estudio revela que la edad y el nivel de estudios son determinantes en la elección del medio de pago y su frecuencia de uso. Las personas de más de 55 años y quienes poseen estudios básicos usan dinero en efectivo a diario en mayor medida. La utilización diaria aumenta a medida que se incrementa la edad. Sólo el 8% de los jóvenes – de entre 18 a 24 años – compran con efectivo cada día frente al 77% de los mayores de 54 años. La tarjeta ya es la forma de pago más común para los millenials – entre 25 y 34 años –, llegando al 47%. El uso de los dispositivos móviles es mayor entre los más jóvenes y las personas con estudios superiores. Además, casi la mitad de los encuestados emplea exclusivamente dinero en efectivo a diario, pero no la tarjeta, mientras que el 17% utiliza ambos medios a diario.
Uso futuro del efectivo y su tenencia
Existe un cierto consenso entre los españoles en que el efectivo seguirá siendo un medio de pago relevante. Según el informe del Banco de España, 7 de cada 10 españoles creen que la utilización del efectivo a un año vista será igual, aunque esta percepción varía con la edad. El 39% de los menores de 35 años cree que su uso disminuirá, en contraposición a los mayores de 64 años, entre quienes sólo un 16% considera que su uso será menor a un año vista. Por otra parte, el 62% afirma que tienen en efectivo lo indispensable para gastos cotidianos. El 23% lo utiliza para cubrir algún gasto imprevisto y únicamente el 7% de los encuestados tiene alguna cantidad en efectivo como sistema de ahorro alternativo a productos bancarios. De media, según los datos aportados, cada español tendría 43 euros en billetes y 6 euros en monedas.
Todos estos datos constatan que, a pesar de los sucesivos avances en materia de digitalización en el ámbito de los pagos, el efectivo se mantiene como el instrumento de pago más relevante en España. En este sentido, como ha apuntado el Banco Central Europeo y el Banco de España[ii], los pasos que se están dando para lanzar un euro digital no tienen como motivación sustituir al efectivo, sino complementarlo.
Fuente: Funcas