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Piero Cipollone, miembro del comité ejecutivo del BCE, afirma: “Estamos comprometidos a garantizar opciones de pago seguras, eficientes e inclusivas. Al respaldar tanto el efectivo como el desarrollo de un euro digital, queremos garantizar que las personas siempre puedan optar por pagar con dinero público, ahora y en el futuro”
En términos de número de pagos, el efectivo se utiliza en el 52% de las transacciones en los puntos de venta, frente al 59% en 2022. En términos de valor, las tarjetas son el instrumento de pago más dominante, con una porcentaje del 45% (frente al 46%) seguidas del efectivo (39%), frente al 42%.
Las aplicaciones móviles, aunque todavía representan un porcentaje relativamente pequeño de los pagos en los puntos de venta, están en aumento y alcanzan el 7%, frente al 4% de hace dos años.
En general, los pagos digitales siguen representando una proporción cada vez mayor de las transacciones generales. Esto se ve respaldado por un aumento de los pagos en línea; estos medios representan el 21% de los pagos diarios de los consumidores en número y el 36% en valor, frente al 17% y el 28% respectivamente en 2022.
El instrumento más utilizado para los pagos en línea son las tarjetas, que representan el 48% de las transacciones, seguidas de otros medios electrónicos como los monederos electrónicos y las aplicaciones móviles, que en conjunto representan el 29%.
Las preferencias de pago declaradas por los consumidores no han cambiado. En 2024, al igual que en 2022, el 55% de los europeos prefiere pagar con tarjetas y otros medios distintos del efectivo en los comercios, el 22% prefiere pagar con efectivo y el 23% no tiene una preferencia clara.
De media, los consumidores consideran que las tarjetas son más rápidas y fáciles de usar. Consideran que el efectivo es más útil para gestionar sus gastos y proteger su privacidad.
Aunque el uso del efectivo disminuye, el 62% de los europeos sigue considerando importante disponer de billetes y monedas como opción de pago. Y una gran mayoría (el 87 %) está satisfecha con su acceso al efectivo, ya que le resulta muy o bastante fácil obtenerlo en un cajero automático o en un banco.
Piero Cipollone, miembro del comité ejecutivo del BCE, afirma: “Estamos comprometidos a garantizar opciones de pago seguras, eficientes e inclusivas. Al respaldar tanto el efectivo como el desarrollo de un euro digital, queremos garantizar que las personas siempre puedan optar por pagar con dinero público, ahora y en el futuro”.
Fuente: Finextra