· La mayoría de los británicos afirman que las empresas deben hacer más para mantener estables los sistemas de pago.
· El efectivo sigue siendo un tesoro nacional y es más popular que las billeteras digitales.
· Más de la mitad de los jóvenes de entre 18 y 24 años utilizan efectivo al menos una vez a la semana.
Casi una cuarta parte (22%) de los adultos del Reino Unido han experimentado problemas con los pagos con tarjeta y teléfono en los últimos seis meses, y más de dos tercios afirman que esto ha hecho que sea más probable que lleven efectivo, según un nuevo estudio* de KPMG UK.
Si bien la mayoría (76%) de los consumidores del Reino Unido confían en la estabilidad de los sistemas de pago de los minoristas y las instituciones financieras, las interrupciones globales de TI y el fraude están generando inquietud entre el público sobre el impacto que estos eventos tienen en su capacidad para realizar pagos. Más de siete de cada diez adultos creen que las empresas deben hacer más para garantizar la estabilidad de los sistemas de pago.
Mientras tanto, un estudio independiente** de KPMG UK a 200 profesionales de pagos que trabajan en instituciones financieras y minoristas del Reino Unido muestra que la mayoría (68%) ha iniciado o llevado a cabo mejoras significativas en el sistema de pagos durante el último año. Las preocupaciones sobre la estabilidad y la disponibilidad del servicio fueron clasificadas por el menor número de instituciones financieras y minoristas como un detonante principal para la modernización de los pagos.
El efectivo sigue siendo un tesoro nacional; es más popular que las billeteras digitales
Las interrupciones de TI de alto perfil y el crecimiento continuo del fraude también están reforzando las preocupaciones sobre una sociedad sin efectivo. La encuesta encontró que más de tres cuartas partes (77%) de los adultos estarían preocupados si el Reino Unido dejara de usar efectivo, un aumento marginal del 72% que expresó preocupación el año pasado.
Más de la mitad (53%) de los consumidores dicen que usan efectivo al menos una vez a la semana, un ligero aumento del 47% del año pasado. En lo que respecta al uso de efectivo en los distintos grupos de edad, más de la mitad (52 %) de los jóvenes de entre 18 y 24 años lo utilizan al menos una vez a la semana, frente al 45 % en 2023. Solo un poco más (58 %) de los adultos de 55 años o más lo utilizan al menos una vez a la semana.
Si bien el efectivo sigue siendo popular, cuando se trata de pagos físicos, las tarjetas son las reinas. El 44 % de los adultos utilizó una tarjeta de débito la última vez que realizó un pago en persona, seguido del 23 % que utilizó una tarjeta de crédito y el 20 % que utilizó efectivo. Solo el nueve por ciento de los adultos utilizó una billetera digital para realizar un pago físico.
Estos hallazgos reflejan algunos de los temas planteados en la nueva Visión Nacional de Pagos del Ministro de Hacienda presentada a principios de este mes, que establece un plan para una infraestructura de pagos del Reino Unido que promueva la elección del consumidor, respaldada por tecnología avanzada, seguridad y resiliencia.
Peter Harmston, responsable de pagos en KPMG UK, afirmó:
“El Black Friday es un período especialmente crucial en lo que respecta a la comodidad, la estabilidad y la seguridad de los pagos y un recordatorio de lo vital que es la resiliencia de la infraestructura de pagos del Reino Unido para los consumidores, las empresas y la economía.
“La mayor conciencia pública de los grandes acontecimientos que interrumpen los pagos, junto con las preocupaciones actuales relacionadas con el fraude, están reforzando la preferencia de los consumidores por la elección de la forma de pago, y algunos vuelven a recurrir a la comodidad del efectivo en tiempos de problemas. Y, dado que más de la mitad de los adultos jóvenes utilizan efectivo al menos una vez a la semana, está claro que el efectivo debe protegerse y ofrecerse junto con otros métodos de pago.
“Se espera que la nueva visión del gobierno para la infraestructura de pagos del Reino Unido vuelva a centrar los esfuerzos en cómo el Reino Unido puede mantener su legado como líder mundial en innovación de pagos. Como parte de esto, las instituciones financieras y los minoristas deberán demostrar que sus sistemas de pagos no solo respaldan la demanda de los consumidores de elección y comodidad, sino que, fundamentalmente, son resilientes frente a amenazas más amplias a la estabilidad y disponibilidad de los servicios de pago”.
Notas para los editores:
*Investigación realizada por encargo de KPMG UK por One Poll entre el 1 y el 4 de octubre de 2024, con una muestra representativa a nivel nacional de 2000 adultos del Reino Unido.
**Investigación realizada por encargo de KPMG por Coleman Parkes en julio de 2024, entre 100 instituciones financieras y 100 minoristas.
Fuente: KPMG