La asociación de usuarios financieros, ASUFIN, ha destacado recientemente en un comunicado el papel del dinero en efectivo ante las situaciones de incertidumbre económica y conflictos: “La polémica sobre la preservación del efectivo en las economías altamente digitalizadas vuelve a surgir ante la guerra que ha estallado en Ucrania”, señalan.
En sus declaraciones insisten en la importancia de garantizar y mantener el dinero físico “como modo de salvaguardar las economías domésticas, en un contexto de alta incertidumbre” y ante el creciente ritmo de digitalización de las economías. Y recuerdan que cualquier medida que fomente la desaparición del efectivo tiene “consecuencias directas en los colectivos más desfavorecidos y vulnerables del sistema”.
En este sentido, desde la asociación reiteran su apoyo al movimiento de preservar el efectivo -llevado a cabo por numerosas plataformas- frente a los riesgos de una digitalización que “arrincone” al dinero físico y argumentan a este respecto, por un lado, que el euro digital “no puede convertirse en una alternativa al efectivo y en ningún caso un sustituto” y, por el otro, que el dinero digital debe tener una alternativa ‘sin conexión’ para preservar su uso en caso de ciberataques o desconexiones del sistema.