Los resultados de la encuesta de GAD3 ponen de manifiesto que uno de los principales factores que avalan su uso es el mantenimiento de la privacidad de los datos personales
La posibilidad de que el dinero físico desaparezca es algo que se aleja vista la tendencia de uso por parte de los consumidores, según la última encuesta realizada por GAD3 para la plataforma Denaria. Así, el efectivo no solo mantiene el liderazgo entre las formas de pago en España (46,3%), sino que se incrementa en cinco puntos porcentuales y cuenta con el apoyo de nueve de cada 10 entrevistados frente al crecimiento de los pagos electrónicos (tarjetas, 'smartphones', transferencias, Bizum...). Además, tres de cada cuatro consideran que el dinero en efectivo es importante en su día a día, aumentando también con respecto al año anterior.
El estudio señala que ocho de cada 10 entrevistados también consideran esencial la existencia del dinero en efectivo a la hora de hacer frente a situaciones de emergencia, crisis mundiales como la de la pandemia o la guerra de Ucrania. Este apoyo es mayor entre los menores de 45 años y entre los usuarios habituales del efectivo y de tarjeta de crédito/débito.
En opinión de Javier Rupérez, presidente de la Plataforma Denaria, "los resultados de la encuesta ponen de manifiesto que los ciudadanos valoran muy favorablemente la posibilidad de disponer de distintas opciones para efectuar pagos, ya sea con tarjeta o efectivo".
Los resultados de la encuesta de GAD3 ponen de manifiesto que uno de los principales factores que avalan el uso del efectivo es el mantenimiento de la privacidad de los datos personales, que para un 72% de los entrevistados continúa siendo una de las principales problemáticas que consideran preocupantes, como consecuencia del uso de las formas de pago digitales. Los más preocupados por exponer sus datos personales son los usuarios habituales de tarjeta y, a su vez, se encuentran entre los menos preocupados por cuestiones como la localización y los hábitos de compra.
Asimismo, la encuesta revela que el bajo riesgo de fraude al usuario es el principal motivo para mantener el dinero en efectivo y no sustituirlo por las nuevas formas de pago digital para el 75% de los entrevistados, seguido de que es la forma de pago que más ayuda a controlar los gastos y a no endeudarse, para un 73%. La eficiencia también es un factor que considera el 69% de los entrevistados, al estimar que el dinero en efectivo debe mantenerse porque es el único medio de pago que siempre funciona.
El acceso al dinero constituye una de las principales cuestiones para los ciudadanos. La encuesta desvela que el 93% de los entrevistados considera que el cierre de oficinas bancarias afecta al acceso y uso del dinero en efectivo, preocupación que se mantiene en los mismos niveles que en la anterior encuesta. En este sentido, las consecuencias más temidas por los entrevistados del aumento del uso en las formas de pago digitales son la exclusión de estratos sociales como las personas mayores, personas con discapacidad o sin hogar, seguida del aumento del control sobre el ciudadano por parte de empresas tecnológicas y la gran fuente de ingresos que supone para estas mismas compañías.
Fuente: El Confidencial