Observatorio
Informe del Grupo de Trabajo ERPB sobre el acceso y la aceptación del efectivo - Consejo Europeo de Pagos Minoristas (ERPB)
El Consejo de Pagos Minoristas del Euro (ERPB) insta a revisar la evolución del efectivo para que siga siendo un medio de pago inclusivo, eficiente y sostenible para los consumidores.
Análisis sobre el acceso y la aceptación de efectivo en la Eurozona
El Consejo de Pagos Minoristas del Euro determina en un informe que a pesar de que el acceso al efectivo y su uso no es todavía un problema en la mayoría de países de la zona euro, se está deteriorando progresivamente. El documento concluye que hay que revisar en un futuro su evolución con el objetivo de que el efectivo siga siendo un medio de pago inclusivo, eficiente y sostenible para los consumidores.
El Consejo Europeo de Pagos Minoristas (ERPB) creó en febrero de 2021 un grupo de trabajo específico que estudiara y pusiera de manifiesto el acceso y la aceptación de efectivo que tiene lugar en la zona euro, especialmente tras la pandemia del coronavirus. Un informe para entender mejor la preocupación real y “relevante” de que en la mayoría de países existe la sensación de que, poco a poco, el acceso al dinero en efectivo así como los servicios responsables de ofrecerlo (bancos, cajeros automáticos…) están empeorando. El informe constata que actualmente el acceso al efectivo no supone todavía un problema pero, también, pone en evidencia las dificultades con las que se encuentra.
La red de acceso al efectivo se ve mermada por la situación actual pero se están tomando medidas
En primer lugar, el grupo de trabajo creado por el ERPB manifiesta que debido a la situación actual muchos bancos y cajas optan por un modelo de negocio más optimizado, lo que se traduce en el cierre de sucursales bancarias. Una cuestión que preocupa porque significa que algunas zonas, especialmente las rurales, pueden tener problemas a la hora de acceder al dinero líquido. A la vez, los costos asociados a la adquisición y el depósito de efectivo por parte de las empresas y el público en general parecen estar aumentando. Por lo que existe una creciente preocupación por la disminución de la red de puntos de acceso al efectivo y las condiciones de servicio correspondientes.
Sin embargo, el análisis también explica que pese el incremento en el uso de medios de pago digitales, el acceso al efectivo sigue estando garantizado en la eurozona. Por otro lado, menciona la gran variedad de iniciativas que se están desarrollando para garantizar el acceso al efectivo en la zona del euro, y que se basan en los puntos tradicionales de acceso al dinero físico, es decir, a través de cajeros automáticos (principalmente redes individuales o cajeros automáticos agrupados) y en las redes de sucursales de entidades de crédito.
La importancia de la distancia y la capacidad en los puntos de acceso al efectivo
Para muchos países, los criterios de distancia y capacidad para los puntos de acceso al efectivo es un tema de alta relevancia que se suele abordar desde los consejos nacionales. Algunos Estados miembros han incorporado en su plan de acción nacional iniciativas para garantizar el efectivo mediante convenios o pactos. Y en el caso de que estas medidas no den sus frutos, el grupo de trabajo propone adoptar más acciones que a través de la vía legal aseguren un mínimo de puntos de acceso al efectivo. Por último, el informe reclama una mayor investigación en las necesidades especiales de las zonas rurales, así como las del envejecimiento de la población.
Algunas soluciones complementarias para acceder al efectivo son la implementación de cajeros automáticos independientes (IADs), la devolución de efectivo y los sistemas de pago en efectivo en tienda. Y, aunque actualmente devienen sólo una fracción del suministro de efectivo, pueden llegar a desempeñar un papel más importante en el futuro debido a la disminución de la red de cajeros automáticos y de sucursales.
No obstante, el informe determina que estos puntos de acceso complementarios no pueden verse como una alternativa completa a la red tradicional ya que, generalmente, no se proporcionan funciones de depósito de billetes y servicio de monedas. Por otra parte, se reconoce el papel de las oficinas de correos al ofrecer servicios de depósito y retiro de efectivo dada su buena cobertura geográfica. Sin embargo, si estas alternativas llegan a tener un papel más destacado en el futuro, es posible que se necesiten más incentivos para que su oferta sea económicamente atractiva para los minoristas y otras partes interesadas.
Aceptación del efectivo, un método de pago confiable
El informe explica que la mayoría de los comerciantes aceptan el efectivo como un medio de pago confiable siempre que se garantice una infraestructura de efectivo idónea para asegurar el depósito y retiro del dinero a una distancia y costos razonables. Sin embargo, el estudio no pudo contar con algunos comentarios de un segmento que se considera importante, en particular el de las pequeñas y medianas empresas y los pequeños empresarios. Por lo tanto, el resultado en lo que respecta a las facilidades de retiro y depósito de efectivo debe tratarse con cautela.
El efectivo seguirá siendo un medio de pago inclusivo, eficiente y sostenible
Las principales conclusiones del informe del ERPB pueden resumirse en los siguientes puntos:
1- El grupo de trabajo considera que es conveniente revisar la evolución del acceso al efectivo y su aceptación en el futuro para asegurar que continúe siendo un medio de pago inclusivo, eficiente y sostenible para los consumidores junto con los medios de pago minoristas digitales. Para ello, hay que revisar los puntos y formas existentes de acceso al efectivo, así como pensar en nuevas fórmulas y qué papel podrían desempeñar en el futuro.
2- A pesar de que el uso de efectivo varía entre los Estados miembros parece haber una tendencia general a la baja en la utilización de efectivo. Por lo tanto, pueden ser necesarias acciones locales antes de que los niveles del uso del efectivo sean muy bajos. Asimismo, debe plantearse si es necesario una iniciativa global desde la UE que asegure el acceso al efectivo y, si es así, lo que esto debería implicar.
3- La evolución del acceso y la aceptación del efectivo podría ser monitoreada más a fondo por el ERPB o por medio de un organismo especializado (por ejemplo, Foro Europeo para la Innovación en los Pago y/o el Grupo Consultivo del Euro Efectivo) en consulta con las partes interesadas del sector.
4- Por último, como parte de este trabajo de seguimiento, se agradecería un estudio sobre las actitudes de los consumidores después de la pandemia respecto a los pagos en la eurozona y un estudio adicional sobre los costos y beneficios sociales de los diferentes instrumentos de pago en el zona del euro.